Enredándose en tu pelo,
enmarañado de pensar y pensar...
¿a dónde querés llegar?
Hamacándose insistentemente
sobre tus ojos pesados
va la madrugada sin parar...
¿a dónde pensará llegar?
Canción desvelada para mí,
para esta cabeza sin rumbo,
para mis ojos sin sueño,
para mis manos sin dueño.
Silba el aire nocturno
filtrándose por la ventana,
soplándote las pestañas...
¿nada te hará desistir?
Al fin el crepúsculo
te anuncia el final del abismo.
Noche perdida. Noche olvidada.
¿Acaso no quedó nada?
Canción desvelada para mí,
para este corazón mudo,
para mis ojos sin sueño,
para mis manos sin dueño.
Qué linda canción. Me gusta la musicalidad de esta canción nocturna.
ResponderEliminarBesos.
El ritmo de la canción es excelente, y sus versos espejan a la perfección lo impiadosas que pueden ser algunas noches de vigilia.
ResponderEliminarUn gran abrazo
SIL
viviana, como los buenos vinos, tu verbo en el tiempo, se ha convertido en dulce arrullo
ResponderEliminarun beso
Hermoso, como todo lo que escribìs Vivu.
ResponderEliminar