miércoles, 8 de abril de 2009

¿Quién me ha robado el mes de abril?

  Los recuerdos suelen ser esos enemigos internos a quienes no podemos sacar a patadas por el culo como se hace con cualquier malnacido hijo de vecino. Son tan nuestros y tan dañinos los muy hijos de puta.


  La mente humana, si es que existe algo como tal, es un laberinto con conexiones monstruosas. Basta una fecha para que todo lo que está asociado a ella venga a agolparse en tus sienes y te cague a palos sin miramientos.

  Como excombatiente de guerra, las imágenes te acosan de noche y de día para recordarte que no podés hacer nada, que estás atado a un pasado atroz que no te va a abandonar nunca. No  importa adonde vayas. Vive en vos como un parásito y se nutre de tus lágrimas.

  Correr. Correr... no tiene sentido.
  
  Ojalá se pudieran arrancar los recuerdos junto con las hojas del almanaque.


10 comentarios:

  1. No me gusta Sabina, pero tiene canciones (como esta) realmente que te dejan pensando...
    Todavia no encontre la forma de hacer que no vuelvan determinados recuerdos... empiezo a sospechar que es imposible.

    Saludos!

    ResponderEliminar
  2. En cambio yo lo amo. La primera vez que lo escuché, hace mil años, estaba en la casa de mi vieja todavía, en mi cuarto. Era una noche de invierno y estaba escuchando la radio a oscuras. Y apareció un gallego que no conocía y largó esta canción. Casi me muero...Ahi me hice sabinero, aunque ahora no lo escuche tanto, para siempre. Hay veces que los recuerdos no son tan hijos de puta, en este caso, el abril de Sabina me llegó a mi una noche de julio.Y vos me hiciste acordar de algo que nunca jamás había vuelto a mi mente laberíntica, que también tiene conexiones monstruosas.
    Un beso

    ResponderEliminar
  3. Los recuerdos nos atenazan muchas veces y, es cierto, cómo los sacamos...
    Pero bueno, convivir con ellos y de vez en cuando darles un patadón debemos hacerlo, para preservar un restito de salud mental.

    ResponderEliminar
  4. Los recuerdos suelen ser especies de parásitos que no podemos extirpar, pero que con el tiempo llegan a ser parte de uno y uno no es más que un montón de recuerdos.
    En otro orden de cosas, Sabina no es más que un Arjona con ínfulas de poeta. Encima esa voz de Mario Pergolini resfriado. No, la verdad que no me gusta.
    Cariños.

    ResponderEliminar
  5. Es cierto, correr huyendo de los recuerdos no tiene ningùn sentido. Porque es inutil, siempre te alcanzan. Lo mejor es dejarlos venir y ubicarse en el ojo del huracan, para comprender que, despues de todo, no era para tanto. Hay tecnicas mentales para enfrentarlos y desarmarlos, de tal modo que cuando vuelvan ya no te hagan daño. La meditaciòn es una de esas tecnicas, por ejemplo. Si la melancolia es recurrente, estas ante una excusa u otra forma de desidia.

    ResponderEliminar
  6. ¿Qué pasa que estás tan violenta?

    ¡Recuperá tu sonrisa, por favor, que sos tan linda!

    Sana sana a los recuerdos que ya pasaron!

    Te comparto una sonrisa y te dejo un besito en el alma :)

    ResponderEliminar
  7. Ignorálos, los recuerdos feos no pueden con vos, sos más fuerte, sos más fuerte, sos más fuerte.

    Un beso enorme, queridísima amiga.

    ResponderEliminar
  8. Me encanta Sabina!!!

    y en cuanto a los recuerdos, es verdad siempre vuelven y te clavan un puñal, pero son solo eso, recuerdos! lo importante es el presente, aferrate a él, y el pasado dejalo donde está,... allá lejos!

    besos y arriba el ánimo

    ResponderEliminar
  9. Uff, pues muy bien que expresas la realidad de algunos recuerdos, si señora!! Y buena canción, como todo lo de Sabina!!

    Besos

    ResponderEliminar